Presentan la primera imagen de un agujero negro. Parece ser que la fuerza de la gravedad allí es tan fuerte que nada puede escapar, ni siquiera la luz. Si no escapa algo tan veloz como la luz es posible que tampoco lo haga la estupidez (E=MC3) Estupidez es igual a masa craneal por la velocidad de la luz al cubo.
Ante semejante amenaza se va a elaborar una ley propuesta por todos los partidos para diseñar planes vitalicios de alejamiento de dichos agujeros en campaña electoral. El más próximo a la tierra está a 3.000 años luz y los telescopios ya han detectado frases entrando a dicho agujero: “los ciudadanos quieren…” “sabemos lo que quieren los votantes” “haremos políticas sociales” “nosotros venimos con las manos limpias”
Entretanto, las estrellas siguen implosionando en programas de televisión metiéndose mano en directo o ganando siete millones al mes detrás de un balón. Mientras este dinero escapa a cualquier órbita razonable, el resto de habitantes de la parte ¿“civilizada”? de este planeta estamos entretenidos por cómo salimos en la foto.
Y así va girando este mundo envuelto en plástico para regalo, con ofertas de consumo rápido que nos lleva a añadir más basura, donde inventamos fronteras para hundirnos en nuestro propia mierda, que al menos es patriótica y conocida.
¿Qué habrá al otro lado del agujero negro? ¿Habrá que llevar una bandera para que sepan de que pueblo somos?
Hay varios agujeros negros en cada galaxia, trillones de planetas donde seguramente haya vida en alguno… pero la pregunta es… ¿Hay vida inteligente en la tierra?